Llega a casa después de un largo día de trabajo y no puedes esperar para disfrutar de un momento en su spa. Pero, ¿qué pasa si su spa está cubierto por una capa de espuma?
Desafortunadamente, no podrá usarlo si encuentra el agua así, al menos por ahora. El agua turbia o espumosa suele ser una indicación de que el equilibrio químico del agua de su spa no es del todo correcto. Con el tiempo, esto puede incluso causar daños, corroer ciertas partes o decolorar las paredes. Pero no se estrese. Una vez que comprenda de dónde proviene el agua turbia y espumosa, podrá deshacerse de ella rápidamente y tomar medidas para mantener el agua cristalina.
Agua turbia y espumosa provocada por los usuarios
El agua turbia y espumosa a veces es causada por jabón, shampoo y lociones que se desprenden de la piel o los trajes de baño de las personas mientras se sumergen en el spa. Para eliminar del agua a estos invitados no deseados, realice una descarga después de cada uso y, de forma rutinaria, al menos una vez a la semana.
Cuando la madre naturaleza quiere darse un chapuzón en su spa
La espuma del spa también puede ser causada por hojas y otros desechos que se descomponen dentro. Su desinfectante está diseñado para eliminar bacterias y algas de su spa. Pero si no quita manualmente las hojas y el pasto, el desinfectante no podrá hacer su trabajo para matar las bacterias y las algas. ¿El desafortunado resultado? Agua turbia o espumosa.
Un mal equilibrio químico puede provocar espuma en el spa
El agua turbia y espumosa también puede indicar que el equilibrio del pH está alterado. Puede agregar la mezcla adecuada de productos químicos para corregir el problema. Primero, pruebe el agua con un kit de productos químicos. El agua con un pH superior a 7,8 partes por millón tiene demasiado pH, mientras que el agua con una alcalinidad superior a 120 pm es demasiado alcalina. Cualquiera de los dos problemas puede provocar nubosidad.